Año nuevo,
vida nueva. 2013 henos aquí señoras y señores, damas y caballeros y todo aquel
que guste de leer mis escritos. Hace menos de un mes pasó el supuesto
apocalipsis. Ese 21 de Diciembre del año anterior que habían predicho los
mayas, donde se suponía la humanidad dejaría de existir y pasaríamos a una
nueva era, nuestras vidas acabarían para siempre y cosas que ya
saben. Sin embargo ya se está siendo costumbre que sobrevivamos a los supuestos
Fin del Mundo.
Como ven
aquí nos seguimos viendo de nuevo. Sé que algunos esperaban lo contrario, hubo
declaraciones de amor adelantadas, compra de objetos y algún placer de últimos
días o locos que donaron y regalaron todas sus pertenencias, hay quienes
esperaban al menos que esa persona desapareciera o de ser posible que se
cambiara de ciudad para no volverla a ver. Lamentablemente para unos y
afortunada para otros todo sigue aquí tal cual como lo dejamos. Con la llegada
de este nuevo año he llegado a pensar que seremos leyendas, solo piénsenlo,
nuestros hijos crecerán creyendo que sus padres (nosotros) sobrevivieron a
epidemias zombis, meteoritos del espacio, profecías de antaño y guerras
espaciales. Claro, por un lado el mundo debería de terminar para aquellos que lo
hacen un lugar peor, como gobernantes, narcotraficantes, compañeros, alguno que
otro profesor que nos hace la vida pesada y para algunos casos, esa persona mal
correspondida. Por el momento aquí estamos. No somos todos los que somos
ni somos todos los que deberíamos de estar. El mundo nos abre las puertas para
una oportunidad más, para comenzar este 2013 confesaré algo que me acongoja con
solo saber que se acerca cada día más y es que comenzaré a agregarle números a
mi segundo dígito en mi edad. La época de pequeño ha pasado, en unos meses más
llevaré de nueva cuenta un uno. 21 años de vida. 21 primaveras y 21 inviernos.
El número del Black Jack,
de buena suerte dicen algunos. Para mí es un año que me aleja de una etapa y me
acerca a otra. Es por eso que hoy colegas míos haré un recuento de la
generación a la que pertenezco y que durante el transcurso de los siguientes
doce meses estaremos cumpliendo nuestros Dulces
21, generación del 92 sean bienvenidos al baúl de los recuerdos de
una de las mejores generaciones. Si hay alguien más que sea cercano a nosotros
adelante, apuesto que muchos temas son de su total igualdad. Somos los actores
principales de esta generación. Sin nosotros no existiría esta gran historia.
1992 año
bisiesto, el gran año para nacer
Nacimos en
un año largo y del Mono según los chinos. Quizá eso explique la locura de
algunos. Nuestra infancia posiblemente sea la última de todas las infancias que
sea digna de contar, somos la última generación que en verdad vivió jugando en
LA CALLE, donde durante el recreo (de más de media hora en la mayoría de las
escuelas) era para jugar a las
atrapadas, la trae, el avión (traga leche o rayuela para mis
colegas foráneos) visitamos cada parque de nuestra ciudad, nos
raspamos cada centímetro de rodilla y fuimos testigos de la
transición en caricaturas de dibujos animados a la animación por computadora.
Pero eso sí, y en esto lo podemos presumir con orgullo y dignidad ¡Somos la
primera generación que jugó con videojuegos decentes! Mientras Super Mario Bros nos quitaba el sueño y
los reflejos, nuestros padres compraban casetes para grabarnos y después
vernos con la mística VHS. Donde la música era llevada en casetes más pequeños
y para regresar la cinta nada mejor que las plumas Bic, porque Bic no sabe
fallar.
Tener un Walkman era la novedad, no se podía estar en onda sin uno de ellos, aunque tuvieras que escuchar la misma cinta una y otra vez por el problema de transportar más de estas. El chat y los DVD no existían para nosotros, el mundo se arreglaba por cartas y mamá y papá.
De niños no sabíamos bien qué pasaba en nuestro país, solo escuchábamos las preguntas de los mayores: ¿Quién mató a Colosio? ¿Bill Clinton se besuqueaba con una señora famosa llamada Monica? ¿El chupacabras existía de verdad o era un aborto de Salinas? ¿ El Sub comandante Marcos es bueno o malo? Estos sí son los grandes misterios por resolver.
Para los que tienen primos o hermanos amantes de la gran música recordaran el sufrimiento de los mayores al enterarse que una leyenda en existencia había muerto, y no, no me refiero a Valentín Elizalde. (Eso es mucho después) Si no a Kurt Cobain, el vocalista y líder de Nirvana se unía a la lista de los 27´s.
Le teníamos miedo a Michael Jackson (En todas sus versiones, colores y edades) ¡A ESO ! El payaso que en algunos casos aun nos hace llorar. Vimos como Chuky revivía, moría y asesinaba a montones con unas manitas de plástico. Soportamos Beverly Hills 90210 en la televisión, Friends era la mejor comedia de la que pudieras hablar. Nuestras primeras series de acción fueron los granes Power Rangers, con Tomy y Kimberly como los primeros amores platónicos de niñas y niños. Todo niño sabía jugar Tazos y de los buenos Tazos; Pokemon aumento su popularidad gracias a ellos, a pesar de que varias madres decían que eran del diablo. Llegar a ver una niña jugar y que te bajara las canicas (no es albur) era como presenciar un milagro. Todos queríamos un Transformer, ser un maestro Pokemon y Digievolucionar a su Digimon. Lloramos con Sandy Bell. "Abuelito dime tú" era un himno gracias a Heidi. Los Pitufos no nos daban miedo y Chespirito era y sigue siendo ídolo y patriarca de nuestras risas sanas. Chabelo es inmortal, todos lo supimos desde siempre, los nuevos e inocentes llevan poco de ver su eterno En Familia con Chabelo. Somos testigos y vivimos todos los Big Brother desde el inicio hasta los VIP, tenemos lamentablemente el origen de La Mapacha y el Pato Zambrano en nuestras mentes.
En el ámbito del buen cine nos quedamos con los ojos cuadrados cuando Toy Story revoluciono la manera de ver películas. Y dimos gritos de asombro cuando Sony le dio al mundo un gran regalo, el Play Station en 1997
Ben 10, Bob esponja y los padrinos mágicos es para maricas, nosotros crecimos con el legado que nos dejaron Mr T, Chuck Norris, El Santo, Blue Demon, El Chapulín Colorado, Los Thundercats y Las Tortugas Ninja. Supimos el valor de la amistad y amor por el fútbol gracias a Oliver Atom. Los mejores equipos de fútbol que hemos visto son: el Niupi y Atletico San Pancho (recientemente los Xolos de Tijuana)
Mención especial para quien lo merece, para quien luchó, murió y resucitó por nosotros, gracias Goku. Por tantas temporadas, capítulos y peleas que nunca olvidaremos. "♪♫Mi corazón encantado brilla ♫♪" Por esa hermosa canción. Confieso que en un episodio al igual que Videl y Gohan también intente concentrar mi ki y volar.
Fuimos testigos de la gran ciencia del hombre. Dolly oveja creada por clonación, le permitió ser la más famosa de este mundo. La sonda espacial que llegó a Marte más de una vez.
Lloramos como quinceañeras empedernidas cuando Jack por culpa de la gordura de Rose no sobrevive en Titanic.
Nos sabemos de memoria las películas de Pequeños Gigantes, Pequeños Traviesos, Nuestra Pandilla, Mi pobre Angelito y Liberen a Willy. Todos deseábamos un perro tan hábil como Buddy. Y para ser más niños Los Tres ninjas y El Karate Kid nos hacían creer aun más en llegar a ser como Jackie Chan, Jet Li y el legendario Bruce Lee. Y cuando no había películas Hey Arnold, Aventuras en Pañales y CatDog no podían abandonarte.
La Internet nos hizo parte de ella o nosotros a ella. Aprendimos a usar una computadora antes que nuestros padres, abuelos y cualquier adulto. Lo hacíamos como juego y curiosidad sana, no como los nerds de laboratorio de hoy en día que se burlan o humillan a quien no sabe lo suficiente o básico según ellos.
Llegamos a los 2000, nueva década, con miedo de otro Fin del Mundo o de que nuestras computadoras exploten. Superando la supuesta extinción y transición al nuevo siglo llegó una tragedia masiva. Vicente Fox nos vende su imagen de "cambio" y se convierte en Presidente de México. Y para colmo nuestros vecinos gringos eligen a George W. Bush para el mismo puesto. Meses después una de las mayores tragedias de las que la humanidad tiene registro. El 9/11 Las Torres Gemelas son destruidas, todo el mundo habla de ello. El narcotráfico se vuelve un tema muy actual que hasta la fecha va en gran aumento. Aprendimos con malas, fuertes, escandalosas y sangrientas imágenes lo que es el terrorismo. Pero vimos gracias a la magia de la Internet lo que es un nuevo mundo. Creímos que la web sería un mundo libre mientras jugábamos con un tetris portable que después abandonamos por los modelos de Game Boy y PSP.
Britney Spears venía a México, pero solo para hacer su famosa Britneyseñal, la despedíamos y adiós a la imagen de niña sexy, linda y virgen.
Nos graduábamos de primaria junto a escándalos como El Código da Vinci, aprendíamos por vez primera lo que era un Tsunami y la destrucción que puede provocar. Entrabamos a la secundaria, poco a poco dejábamos la infancia atrás. Juguetes, muñecas y tantas buenas caricaturas que nos acompañaron por años. Los Caballeros del Zodiaco seguían con nosotros pero cada vez más lejos. Ahora llenábamos las salas de los cines y aplaudíamos con gran entusiamo para ver el final de la saga de El Señor de los Anillos. Mientras discutíamos si las secuelas de Harry Potter eran o no mejores.
Durante la adolescencia aprendimos de música y chicas, los vídeo musicales eran mejor que nunca. Aparecían los primeros MP3 junto con los celulares que dejaban de aparentar ser ladrillos y venían acompañados de cámaras internas y una que otra lamparita. El videojuego de The King Of Figthers invadía cada consola o maquinita de monedas de la ciudad, pueblo, etc.
Cartoon Network, Fox Kids y Nickelodeon poco a poco dejaban de ser tan cheveres como antes, hasta llegar a lo que son ahora. Qué pasó con esa gran programación. Ahora se convirtieron en CN, Disney XD y Nikc. Pobre juventud de ahora, nunca sabrán de lo que se perdieron.
Muere el Papa Juan Pablo II y los Chicos del Barrio nos demuestran que ya no somos niños según sus capítulos.
Poco después cambiamos de ídolos, ya no eran El matador Luis Hernández, ni Jorge Campos, tampoco Zidane. En el 2005 Giovani Dos Santos, Carlos Vela y su camada de seleccionados se convierten en héroes nacionales, México es campeón del mundo sub 17 en Peru.
Mientras veíamos el Mundial de Alemania y esperábamos lo mismo que se hizo en Peru por las tardes íbamos a nuestros primeros bailes y salíamos de noche, nuestra selección de fútbol daba un juegazo contra Argentina donde tristemente perdimos.
Ya no veíamos Scooby Doo ni a Pinky & Cerebro con mamá antes de cenar. Ahora se hablaba de las elecciones y la lucha entre un chaparrito pelón llamado Calderón y el mesías tropical de López Obrador para futuro Presidente de esta nación.
Las Taka-taka y sus moretones eran cosas del pasado, adiós a las manitas pegajosas era hora de la tecnología, la música digital y lo touch. Bienvenido el Iphone, el Facebook y las Redes Sociales. Chubaca era una botarga sin chiste en comparación con las gráficas del X-Box 360. Dejábamos en el olvido los lapices enormes, las estampitas de álbumes. Y en nuestros corazones le decíamos adiós al Tamagochi. Nos acercamos al fin de la secundaria. Malcolm, Otro Rollo, Los Simpson y South Park era lo más visto en nuestra agenda televisiva. Dábamos gracias por el final definitivo de REBELDE o RBD como lo quieran recordar.
Llegamos a preparatoria, con todo y cambio de disquete a CD, de acetatos a power point, de niño a joven. Las chicas dejaban de ver a Sabrina la bruja adolescente o Clarissa lo explica todo. Teníamos un conocimiento enorme sobre las temporadas del Chavo del 8. Era el 2007, nos movíamos por el messenger, firmar metroflogs y visitar Hi5. Ya no nos dormía Topo Gigio y el coco no nos asustaba. Al contrario Barack Obama se convertía en la incertidumbre del continente.
Ya no usábamos los scooter o patines del diablo, ahora podíamos andar en auto y llegar más noche a casa. En nuestro final de preparatoria nos sucede la primera epidemia zombi: la gripe H1N1 o influenza porcina se convirtió en pandemia. Vacaciones de influenza y el semestre de clases más corto y raro que pudimos tener. El miedo llegó a muchas personas, mito o realidad sobrevivimos a eso y al aumento de las tortillas y la gasolina. (Que aun no deja de aumentar, quizá un día si nos mate) Ese mismo año despedimos a Michael Jackson. No sobrevivió.
Todos gritamos como locos y revivimos nuestras batallas, se cumplen 200 años de nuestra Independencia y 100 de la Revolución. En el mundial de Sudáfrica 2010 Cuauhtemoc Blanco demostró que la edad no es impedimento para triunfar. Vencemos a Francia, revivimos el cinco de mayo. Semanas después Argentina nos eliminaba de nuevo, luto nacional. Y para Navidad todos deseábamos la primera Ipad.
2011- 2012 la guerra contra el narcotráfico es el tema de mayor habla en todo el país, vivimos entre enfrentamientos armados, balaceras y noticias de estrangulados a diario. Los ahora niños ya no salen a las calles, poco a poco se dejan de escuchar a las llamadas banditas o pandillas de las colonias, ya no existen tantos pandilleros como los de antes, ahora son maleantes o pistoleros. Los de la gente o la letra. Se cambian los temas de conversación y en las noticias se lee de una llamada deuda que nos va a cargar a todos. Ya no tenemos 10 y nuestros temas de interés son diferentes. Pensamos muy diferente y nos buscamos en nuestro interior. Somos testigos de la crueldad del hombre en casos como el Casino Royale en Monterrey. Los activistas se hacen héroes y líderes a seguir. Javier Sicilia por ejemplo. Entre tanto caos, crisis y lágrimas en el país, el fútbol nos da una alegría. México se corona campeón de nueva cuenta en el mundial sub 17, también lo hace en los juegos Panamericanos de Guadalajara. Ambos en nuestro país. Para terminar, en el 2012 se gana la medalla de oro en fútbol frente al mejor rival que se puede elegir, Brasil.
Gente estemos felices, primero porque es Año Nuevo, comienza el 2013. Y después por las ventajas de ser de esta generación, miren de esta manera. Ya tenemos veintes en edad, ya conducen. Tienen la mayoría de edad. Toman, fuman. Quizá hasta ya estén casados, o al menos con novia/o. Pueden decirle niños a los de secundaria y por fin papá y mamá ya no te tratan como pequeño. Hablamos mejor (ya sin decir tantos wey) y si somos amigos de algún profesor ya no se ve tan mal. Podemos tomar a una chica de la mano frente a tus amigos sin miedo a que tengas un hijo con ella. Hemos aprendido (quizá a las malas) a entender el doble sentido. Ahora los niños te tienen miedo (ya que puede que parezcas señor o señora) o te admiran por ser su ejemplo. Tomamos Coca-cola en bolsa, soportamos las tonteras de la televisión y ahora vivimos en el Internet. Estamos vivos y somos más resistentes que nada. ¡Crecimos sin celulares y sin Internet! Cuando viajábamos tardábamos horas en llegar, no importaba el lugar, no había tantos puentes o carreteras amplías como ahora. Sabemos andar en bicicleta, patines, patineta, la vida nos ha preparado para cualquier amenaza zombi. Durante más de nueve años cargamos el doble de nuestro peso en las espaldas con mochilas y útiles. (Dichoso aquel que uso de carrito) De niños bebíamos frutsis y jugos en empaques de osito, comíamos de todo y con $10 era más que suficiente para vivir. No existía la obesidad infantil y si compartíamos en lonche no nos contagiábamos de nada, salvo de piojos, pero eso no era por la comida. Tuvimos veranos eternos y Navidades con Nieve. Si te daba sarampión o varicela significaba más vacaciones. No sufrimiento. No hubo PS3, ni tablets cuando eramos niños. Tampoco más de 100 canales en nuestra televisión, tampoco smartphones. Y saben qué, la pasábamos genial. Calles sanas, globos de agua, piedras y una pelota era lo único que importaba. El calentamiento global y las crisis económicas no las conocíamos. No importaba el número de "amigos," Suscriptores o seguidores para saber si existías o no, bastaba con salir, tocar un timbre, gritar, chiflar o simplemente reír para que toda tu calle te acompañara a divertirte. No nos catalogábamos ni teníamos esas tonteras de separación grupal como: punketos, darketos, skatos, emos, frikies, fresas, nerds, otakus. Todos eramos un mismo grupo. No teníamos que ir a un psicólogo porque nuestra foto de perfil no logrará los suficientes "Likes" o porque nuestro "amor" nos ocultara sus post. Los sentimientos no eran estados, las peleas con las personas que te importaban se arreglaban a palabras, siempre de frente. No por mensajes de whatsaap. Si alguien te molestaba y te hartaba quizá llegabas a los golpes, pero no lo difamabas por Internet. Aprendimos a crecer con eso. La marca de la ropa no representaba quien eras. Tampoco el celular.
Si después de leer esto no entendiste ni la mitad, te felicito, eres un bebe de preparatoria o secundaria, quizá aun menor. Te presumo que nosotros fuimos parte de una gran camada. Y que tristemente no conociste cosas muy buenas de esta vida.
Generación del 92 durante los siguientes días estaremos cumpliendo nuestros Dulces 21 ¡ Felicidades ! Felicidades por la dicha de crecer como niños, por compartir esta vida, algunos ya lo han olvidado, recuerden que todo lo que tenemos hace tiempo no existía, aprovéchenlo y recuerden siempre que para bien o para mal nosotros ya cambiamos al mundo.
Felices 21 y siempre recuerden ser niños.
